Optometría Propioceptiva

A menudo llamada el sexto sentido, es la capacidad de sentir y percibir nuestro propio cuerpo. Este sentido nos proporciona información interna, como la sensación de hambre, sueño, sed, frío, calor e irritabilidad.

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¿Qué es la PROPIOCEPCIÓN?

A menudo llamada el sexto sentido, es la capacidad de sentir y percibir nuestro propio cuerpo. Este sentido nos proporciona información interna, como la sensación de hambre, sueño, sed, frío, calor e irritabilidad. Es una forma de conciencia interna que nos conecta con nuestras necesidades físicas. Al mismo tiempo los 5 sentidos actúan como puente entre el mundo exterior y nuestro cerebro, permitiéndonos recopilar información del entorno. 

Es fundamental reconocer que diversos estímulos ejercen un impacto relajante en el cuerpo, generando cambios en el tono muscular y contribuyendo a una reprogramación propioceptiva. Esto se evidencia a través de:

OJOS: Exposición a prismas y colores, influenciando positivamente la respuesta muscular y la percepción visual.

BOCA: Utilización de placas dentales, que no solo protegen los dientes, sino que también influyen en la relajación general.

PIEL: Aplicación de masajes terapéuticos, generando una respuesta relajante en los músculos y en el sistema propioceptivo.

OÍDO: Experiencia con música relajante, afectando la tensión muscular y contribuyendo a la reprogramación propioceptiva.

PIES: Uso de plantillas, impactando la postura y el tono muscular, promoviendo cambios en el sistema propioceptivo.

Cada uno de estos estímulos tiene el potencial de inducir un estado de relajación, influenciando la respuesta muscular que a su vez modificará al sistema propioceptivo efectuando una REPROGRAMACIÓN PROPIOCEPTIVA.

ANTECEDENTES DEL SÍNDROME DE DEFICIENCIA POSTURAL (SDP)

El SDP (síndrome deficiencia postural) fue descubierto en Lisboa, Portugal, en 1979 por el Dr. Martins Da Cunha, especialista en Rehabilitación, al tratar a pacientes con quejas de dolor muscular. Colaborando con el Dr. Orlando Alves Da Silva, Oftalmólogo-Estrabólogo, observaron que estos pacientes compartían síntomas como desequilibrios, vértigos, ataques de pánico y alteraciones en la atención y la visión. Este conjunto de manifestaciones condujo a la denominación del cuadro como Síndrome de Deficiencia Postural.

 

PRINCIPALES SÍNTOMAS DEL SDP

  • Dolor de cabeza (migraña)
  • Dolor retro ocular
  • Dolor de tórax
  • Dolor de pecho
  • Desequilibrios
  • Caídas inexplicables y Mareos
  • Este Síndrome puede estar o no combinado con algún problema de agudeza visual

 

SIGNOS MENOS COMUNES: 

  • Rigidez en el cuello
  • Periartritis
  • Lumbalgias
  • Paresias
  • Taquicardias
  • Fatigas
  • Disnea
  • Claustrofobia
  • Trastornos en el sueño
  • Dislexia (disgrafía, disortografía), Dislalia
  • Trastornos en la memoria y la atención
  • Hiperactividad.

¿CÓMO FUNCIONA EL PRISMA ACTIVO?

Proporciona un efecto relajante al influir en uno de los seis músculos que controlan la propiocepción. Este proceso mejora la conciencia corporal, corrige la ubicación espacial y optimiza la coordinación ojo-mano y ojo-pie. En ocasiones, los prismas se utilizan con diversas graduaciones, ya que su percepción visual impacta en el tono muscular y puede contribuir a la estabilidad emocional. Cuando se incorporan EL PRIMAS a un lente, se denominan lentes posturales.

 

En algunos casos, combinar el uso de lentes posturales con un enfoque multidisciplinario resulta beneficioso. Este enfoque aborda los ojos, boca, oídos, pies y terapia manual, actuando como las piezas de un juego de Jenga. Un sensor disfuncional puede aumentar el tono muscular y afectar la postura. Integrar terapias de aprendizaje, lenguaje y manuales junto con lentes posturales resulta más efectivo al trabajar en programas específicos. Adicionalmente, seguir pautas de higiene postural, como el apoyo de los pies en un banco y el uso de atriles para lectura y escritura, potencia los beneficios del tratamiento.

OPTOMETRIA PROPIOCEPTIVA